Y con humildad es como jugará el Real Madrid en el Vicente Calderón. El discurso del entrenador blanco a la plantilla en las últimas horas no ha podido ser más contundente: “Tenemos que salir como si fuéramos 0-0. No pensamos en el 3-0 del encuentro de ida. Hay que ir a por todas y a ganar el partido. Si metemos un gol, todo será mucho más sencillo”. Los pesos pesados han interiorizado el mensaje al máximo. Se acabaron episodios como los de Dortmund hace tres temporadas. Si el Atleti se mete en la eliminatoria que sea por méritos propios y por relajación madridista.
El francés repite sin cesar, según ABC: “Si salimos con la tranquilidad del 3-0 a favor, cometeríamos un grave error. Tenemos que salir con la misma agresividad que pondrán ellos. No será sencillo pero un gol sería casi definitivo”. Nadie habla de la final porque el objetivo está todavía a 90 minutos. Cuando se consiga, será el momento de pensar en el rival de Cardiff el próximo 3 de junio.
En el fútbol, como en la vida, la excesiva confianza no es buena. Si el Real Madrid ha llegado a estas alturas luchando por todo es única y exclusivamente por el trabajo diario y la concentración máxima en cada partido. En el Vicente Calderón, por supuesto, no cambiará el guión. Zinedine Zidane ya se ha encargado de recordárselo a la plantilla.
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