Según hemos podido saber en Defensa Central en exclusiva por fuentes próximas a la entidad madridista, es la norma y en la Liga se encargaron de recordárselo al Madrid para que los blancos se vieran obligados a desplazarse y jugar el partido sí o sí.
A pesar de que los blancos no veían muy seguro el tema del viaje el viernes ni el jugar a las 21.00 horas, este hecho, el de perder 3-0 porque la Liga no decidió suspender ni el viaje ni el encuentro, fue algo que obligó a los blancos a hacer un viaje y jugar un partido que no deseaban.
Esta situación está basada en lo que se denomina como chantaje. El Madrid viajó hasta Pamplona para no perder los tres puntos directamente por la decisión de La Liga. A Zidane y Florentino se le juntaron muchas cosas que no gustaron en absoluto, a día de hoy siguen enfadados con lo ocurrido.
Un viaje de muchísimo riesgo en avión. Un partido con el césped bajo hielo, añadiendo además el regreso de vuelta a la capital de España. Y si el Real Madrid en algún momento se le pasó por la cabeza negarse a jugar, La Liga se encargaría de que el Osasuna se llevase los tres puntos.
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