La Superliga Europea brindará unos 3.500 millones de euros para comenzar. Ese es el dinero a repartir entre los 12 clubes fundadores más los tres que están cerca de unirse.
Todo este dinero irá destinado a minimizar el impacto provocado por la pandemia y reducir así la crisis que ha generado los estadios vacíos y el cese de la competición unos meses.
La entidad financiera JP Morgan será la que ayude a consolidar la competición proporcionando un apoyo económico para propulsar el nivel deportivo.
Los premios de esta nueva competición serán más ambiciosos y por ganar la competición se podría sumar 400 millones de euros al casillero según informa Marca, por los 120 millones que ganan ahora los equipos campeones de la Champions League.
La mejora económica viene de los derechos audiovisuales y comerciales
La Superliga ha informado que el aumento de las cantidades en los premios se debe directamente a los derechos comerciales y audiovisuales que han gestionado ellos.
Esto se debe a que la nueva competición generaría mayor interés mediático y las cantidades que pagarían las televisiones serían superiores.
Además, el fondo de solidaridad de la nueva competición habla de 10.000 millones de euros, por los 4.100 millones que en 2020 destinó la UEFA a las Federaciones que son los que las reparten.
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