Vinicius fue un torbellino. Incendiaba el partido con cada acción y la grada del Camp Nou trató de desestabilizarle sin éxito. De hecho, el jugador del Real Madrid devolvió a los seguidores del Barça su odio de la mejor forma posible.
Alaba marcó un auténtico golazo que dejó mudo al estadio que nunca calla. Y Vinicius, mientras que sus compañeros celebraban el gol, se encaró con los seguidores del Barça que no dejaban de increparle: "¿Ahora qué?", decía.
Dicen que el miedo se huele y Vinicius lo notó a kilómetros. Cuando estaba en Brasil veía los clásicos y alucinaba con los pitos y abucheos que recibía Cristiano Ronaldo. Ahora le toca a él, pero lejos de asustarse, se 'excita'. Y esto sólo lo tienen los grandes.
Cuando fue sustituido por la banda en los últimos minutos, recibió una reprimenda que se tomó como una buena sinfonía. En el Camp Nou trataban de pagar los platos rotos con odio hacia el brasileño, pero no le afectó lo más mínimo.
Vinicius Jr pomete ser (si es que no lo es ya) uno de los grandes líderes del Real Madrid. Un azote culé como lo fue en su día Cristiano Ronaldo. Que se preparen en la Ciudad Condal porque le van a tener que aguantar muchos años.
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