En el Madrid siguen teniendo muchas esperanzas depositadas en Kubo. El japonés demostró durante los pasados Juegos Olímpicos, la gran calidad que atesora en sus botas.
Y esta temporada había comenzado con buen pie. Después de no tener minutos en el Villarreal ni en el Getafe la pasada campaña, esta había vuelto a encontrar la confianza en Mallorca.
Hasta que llegaron los problemas de rodilla. Le han tenido parado casi tres meses y eso puede jugar en su contra con vistas al futuro. Y es que Kubo se la juega a partir del mes de enero. (Alves rendido a Vinicius)
Ancelotti va a estar muy pendiente de sus progresos y sus actuaciones con el equipo bermellón, y más ahora que está a punto de reaparecer. Y es que puede ser decisivo para su futuro en el conjunto blanco.
Vinicius dejará una plaza libre de extracomunitario con su nacionalización, la que podría aprovechar el nipón. Por eso se juega a partir de enero, la posibilidad de estar la temporada que viene en el Real Madrid.
Como decimos, Ancelotti va a mirar con lupa sus actuaciones desde la distancia. Y es que el italiano es quien tiene la última palabra para decidir si regresa, aprovechando esa plaza libre, haciéndole hueco en el equipo.
Grandes sensaciones
Hasta que tuvo los problemas en el menisco, Kubo estaba dejando grandes sensaciones, confirmando el buen papel que había hecho con su selección en la cita olímpica, a los que llevó hasta semifinales.
A pesar de incorporarse tarde, había sido titular en 5 de las primeras 6 jornadas, demostrando su polivalencia para jugar por la derecha o por el centro, detrás del punta.
Sin embargo, en el partido precisamente frente al Madrid en el Bernabéu, tan sólo estuvo 45 minutos sobre el césped. No salió en la segunda parte, y no le hemos visto jugar hasta el momento.
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