Y no ha podido ser más directo. Con su sonrisa de niño (19 años) que siempre le caracteriza. Lo respondió de forma concisa, breve, y dejando claro que no le asusta ninguna competencia. Quiere a los mejores y sabe que Aurelién Tchouaméni, como él, está llamado a marcar una era sobre los terrenos de juego. Camavinga, por ello, dejó claro que su fichaje le produciría una enorme felicidad.
"Estoy muy contento, ya he jugado con él con Francia", empezó deslizando sobre el fichaje inminente del mediocentro todavía del Mónaco y que firmará por el Real Madrid en cuestión de días, tal y como aseguran desde la prensa gala.
"Espero que venga Tchouaméni a Madrid, ya he hablado con él, pero no sé cómo está la situación. A ver qué pasa en los próximos días (risas)", matizó entre risas, de forma directa, sobre esa posibilidad de juntarse en la medular madridista que viene.
Camavinga sigue creciendo
Apenas tiene 19 años, pero su nivel mostrado ya es de jugador top mundial. Camavinga ha jugado un total de 1866' y ha enseñado a los aficionados de qué pasta está hecho. "Todavía estoy en un sueño. Creo que de momento no me doy cuenta de lo conseguido y es posible que lo haga durante las vacaciones. Me diré: ¡Vaya locura", reiteró.
"Ya había tenido la oportunidad de ir a Cibeles a celebrar la Liga y volví para la Champions. Vives emociones enormes, pero luego hay que saber darle sentido a las cosas y volver al trabajo. Tuve unos días para disfrutar, pero ahora debo concentrarme en la selección. Aunque todavía tengo la Champions en la cabeza".
De llegar Tchouaméni y quedarse Ceballos, el centro del campo futurible del Real Madrid estaría más que completo. A la espera de saber qué pasa con Jude Bellingham, pero con total garantías sumándose a Fede Valverde y Eduardo Camavinga.
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