El cuerpo técnico merengue no estaba para rotaciones en esta eliminatoria, pese al exigente calendario que tienen por delante, sobre todo por la plaga de lesiones que tiene el Real Madrid ahora mismo.
Ancelotti apostó por el centro del campo de la decimocuarta con Luka Modric y Toni Kroos, aunque en esta oportunidad, Eduardo Camavinga empezó de titular haciendo de Casemiro.
El centrocampista francés, que cada día va a más, está agradando especialmente al entrenador italiano en esa posición de pivote, algo que ya reconoció en la rueda de prensa previa a enfrentar a los colchoneros, razón por la que volvió a apostar por el francés en esa función.
Sin embargo, Camavinga no duró mucho de centrocampista, ya que en el minuto 43 Ferland Mendy cayó lesionado, lo que obligó a Ancelotti a recurrir al dorsal '12' merengue como lateral izquierdo.
En esta posición el galo demostró que está para lo que el cuerpo técnico le necesite, especialmente porque con su actuación de 10 se ganó, una vez más, al estadio Santiago Bernabéu, derrochando físico, pero también criterio y calidad al momento de jugar con el balón.
De momento parece muy difícil que alguien pueda quitarle la titularidad a Eduardo Camavinga, por lo que el regreso de Aurélien Tchouaméni será un dolor de cabeza para Carlo Ancelotti.
El de Cabinda se ha ganado ser inamovible en el Real Madrid, ya que su intensidad, pero también su capacidad de sacrificio es algo que viene muy bien al club blanco en estos momentos, sobre todo con el intenso calendario que tiene el equipo merengue en las próximas semanas.
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