Los blancos jugarán con una presión extra, ya que conocerán cuál será el resultado del Barcelona antes de jugar su partido. El conjunto de Ancelotti se mide ante el Valencia este domingo a las 16:15, mientras que el Real Madrid disputará su partido a las 21:00.
En el mejor de los casos, si el equipo de Xavi cae derrotado, los blancos podrían reducir hasta -4 su distancia con el líder. Por otro lado, si el Barcelona consigue ganar en Mestalla, implicaría que el Real Madrid podría marcharse a una distancia de -10 puntos.
No se puede fallar
Pase lo que pase, a los blancos no le quedará otra que sacar los tres puntos ante un Betis que siempre pone las cosas muy complicadas. El Real Madrid no puede fallar más en la competición doméstica y Ancelotti es consciente de ello.
El técnico italiano ha vivido situaciones similares en su carrera y sabe que una distancia tan amplía sería inalcanzable. Además, tendrán que jugar con este factor en uno de los campos más complicados de la competición como es el Benito Villamarín.
De victoria en victoria
El Real Madrid tendrá que levantarse lo antes posible de estos dos últimos 'pinchazos' y 'matar' todas las dudas generadas. Ancelotti ha transmitido a su plantilla la importancia del encuentro de este domingo y les ha hecho saber que será una final más.
El entrenador merengue cree que la única opción de poder levantar nuevamente el título liguero es ganando todos los partidos que restan. Carletto lleva muchos años en esto y sabe que encontrar una buena dinámica puede ser la clave para sacar las competiciones adelante.
Ancelotti confía plenamente en su equipo, ya que está más que satisfecho con el rendimiento que han tenido los suyos. El cuerpo técnico está trabajando para pulir varios aspectos del juego y salir de Sevilla con un chute extra de cara a lo que resta de campaña.
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