La sorpresa positiva de esta temporada es Brahim Díaz. Su rendimiento ha gustado mucho a Carlo Ancelotti, que cuenta más con él en este tramo final de la temporada.
Su notoriedad también ha crecido y otros equipos de la élite europea quieren ficharle. Son varias las ofertas que han llegado hasta el Real Madrid, pero todas ellas acaban rechazándose: ni el jugador ni el club quieren separar sus caminos.
Los rumores sobre el mercado de pases continúan aumentando, algo que irá a más con el final del presente curso y que va más allá del ‘caso Mbappé’.
Esto claramente impacta en Brahim Díaz, quien está firmando una gran temporada, con goles y asistencias que están resultando muy importantes para Carlo Ancelotti.
Por esta sencilla razón, es un jugador que goza de mucho mercado, es decir, dispone de pretendientes que estarían encantados de hacerse con sus servicios. Uno de ellos es el Chelsea. El equipo londinense, según afirman en Inglaterra, estaría por la labor de pagar 60 millones de euros por él.
El malagueño no contempla otra opción que la de seguir en el Santiago Bernabéu a partir de la próxima temporada. Le da exactamente igual que venga Mbappé, Endrick o quien sea. Desea continuar defendiendo los colores de su club.
Así pues, ya le ha dejado claro a su gente más cercana la manera en la que va a afrontar esta oferta y cualquier otra que pueda llegar: “Si el club me dice que no cuenta conmigo, lo miraríamos, pero estoy encantado en el Madrid y ellos conmigo, no quiero moverme del mejor equipo del mundo. Este es mi sueño”, ha comentado a su entorno.
Encantados con él
Las voces autorizadas de la institución están encantadas con él. Florentino Pérez ya le ha demostrado en varias ocasiones su satisfacción y la dirección deportiva solo tiene palabras de admiración hacia Brahim. A día de hoy, 5 de abril, es muy difícil pensar que se pueda marchar.
Además, conviene resaltar que las cuentas de la entidad están saneadas y no hay ninguna necesidad de desprender de los jugadores de ataque. El proyecto que se está gestando en la capital de España no puede ser más ilusionante.
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