El Bayern de Múnich salió apretando, tal y como era de esperar. El equipo teutón salió con la intención de mandar y de llevar el peso del encuentro durante los primeros compases.
Sin embargo, esta sensación duró hasta que el protagonista de esta noticia empezó a hacerse con el control del encuentro. Todos los ataques del conjunto blanco salían de sus botas y cambió la inercia del choque.
La asistencia a Vinicius en el primer gol es la gran prueba del partidazo de Kroos. El ‘8’ merengue indicó al brasileño donde le iba a mandar el esférico y así hizo. Por su parte, el carioca no falló de cara a puerta.
El madridismo pide que se quede
Esta sensación, evidentemente, no es de hoy, pero en noches como esta sale a relucir mucho más. Al alemán le queda un año de contrato y de él depende continuar o no. La entidad quiere que renueve, pero, inevitablemente, la decisión será de él.
Opte por continuar o marcharse, desde la zona noble de Chamartín respetarán todo lo que haga. Lógico y normal. Es lo mínimo que se merece después de una trayectoria impresionante. Su partido de hoy puede ser histórico en caso de que el Madrid acabe ganando la Liga de Campeones.
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