Nuri Sahin apenas disputó 10 partidos la pasada campaña y en las oficinas de Concha Espina piensan que sería muy contrapruducente para su carrera pasar otro año más prácticamente en blanco. Sin embargo, Mou no lo ve así-o al menos no lo veía- y el turco seguirá casi con toda seguridad en la plantilla.
El propio futbolista está convencido que esta temporada volverá por sus fueros y por ello se niega sistemáticamente a salir del club. Si Modric acaba llegando, la competencia en la medular será brutal y el otomano tendría serios problemas para encontrar un hueco.
Los intereses de la dirección deportiva chocan con los de Mourinho que quiere una plantilla amplia para hacer rotaciones. Mou, inteligentemente, no quiere desprenderse de nadie y menos del que fue mejor jugador de la Bundesliga en la temporada 2010-2011. A Sahin no se le ha olvidado jugar al fútbol, simplemente necesita confianza, entrenamientos y minutos. Mou está dispuesto a dárselos.
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