La UEFA mete miedo con el asunto de las tarjetas

En el organismo europeo se hacen los interesantes y no descartan sanciones





La prensa inglesa, tan ávida de este tipo de carnaza, afirmó este jueves que los dos jugadores merengues habían forzado la amonestación para cumplir el ciclo de amarillas. Algo prácticamente imposible de demostrar, pues el colegiado Oddar Moen no denunció esto en su acta del partido y ni siquiera las tomas de realización del encuentro reflejaron la acción de Xabi Alonso que provocó la amonestación. De ahí que resulte realmente complicado que la UEFA pueda llegar a 'meter mano' en este asunto.

Aún así, fuentes de la UEFA han hablado con el diario 'As' y han señalado que "aún no se ha tomado ninguna decisión. El Comité espera los informes arbitrales. Y aunque no indicaban nada, cabe la posibilidad de que Control y Disciplina actúe de oficio". Unas palabras que suenan más a amenaza que a realidad. Y es que hay que tener en cuenta que en esta ocasión la sanción sería más dura de lo habitual por haber un precedente, el ocurrido el 23 de noviembre de 2010. Entonces Ramos y Xabi se 'autoexpulsaron' en Amsterdam y fueron sancionados por ello.

En consecuencia, existe el riesgo de que los dos se queden incluso sin jugar una hipotética final en Wembley. Aunque esta posibilidad es realmente difícil de darse, toda vez que crearía un precedente gravísimo. En esta ocasión ni siquiera hay pruebas visuales de una de las acciones y el colegiado no vio nada raro. Así que, ¿puede realmente la UEFA sancionar a los dos jugadores sin saber realmente si lo hicieron intencionadamente? De ser así, sería el primer castigo tras 'adivinar' los pensamientos de los jugadores. De locos...