Los bases resultaron decisivos. El de Mahón apareció cuando más lo necesitaba el equipo, echándose a los suyos a la espalda en un momento critico y ante los de Jaume Ponsarnau, muy crecidos después de su gran comienzo de partido. Llull volvió a ser el líder, el de siempre, pero al que esta temporada no le están saliendo bien las cosas; para guiar a los blancos al liderato del marcador al descanso.
A su vez, Campazzo rompió el partido al final del tercer cuarto como nadie sabe mejor que él, desde la defensa y con un ritmo vertiginoso en ataque, para evitar la reacción del equipo valenciano de cara al último cuarto con un +16 arriba. Por su irrupción final, el último cuarto fue mero trámite. Felipe Reyes hizo historia alcanzando los 1.000 partidos oficiales con la elástica blanca.
Nada tuvo que ver el comienzo del segundo choque con el del primero. Los jugadores, más aún los ‘taronja’, le metieron más intensidad y se vivieron algunos piques entre ambos equipos. El Madrid, de la mano de un entregado Rudy, llevó la iniciativo en el marcador (12-8, minuto 6). Pero Dubljevic, que le ganó la partida en los primeros minutos a Tavares; San Emeterio y Tobey, con cinco puntos consecutivos cada uno, lideraron un parcial final de 2-19 ante la debilidad defensiva blanca y su desconexión ofensiva al final del primer cuarto y el comienzo del segundo (14-27, minuto 13).
Laso comenzó a mover el puzle y las nuevas piezas, con Llull a los mandos y Thompkins y Ayón en la ejecución, le dieron un soplo de aire fresco al equipo desde el perímetro y la considerable mejora en la defensa hasta el descanso. El base de Mahón comenzó el cuarto con dos 2+1 consecutivos y lo acabó con tres triples prácticamente seguidos (13 puntos para él en el segundo parcial) para romperle todos los esquemas a Ponsarnau y guiar al Madrid al liderato del encuentro al descanso (42-36) tras un gran segundo cuarto de +14 sobre los ‘taronja’.
Los blancos continuaron con su vendaval al comienzo de la segunda mitad para tratar de romper el duelo cuanto antes. Randolph tomó el relevo de Llull y siguió hurgando aún más en la herida visitante (55-38, minuto 25). Sin embargo, el choque se fue calentando con algunas acciones polémicas de los colegiados y el Valencia Basket lo aprovechó para reducir los daños en torno a los 10 puntos, pero un final de cuarto estelar de Campazzo (siete puntos en dos minutos) echó por tierra su trabajo de cara al último cuarto, acercando la victoria madridista (68-52).
Con el triunfo ya en el bolsillo, Laso apostó por Reyes para llevarse la ovación del Palacio por su duelo 1.000 de blanco y Ayón y Thompkins llevaron la manija ofensiva para alcanzar la máxima renta (77-58, minuto 36). Thomas, en los últimos segundos, maquilló en su medida la derrota ‘taronja’ (79-66). Victoria del Madrid, 2-0 y a la ‘Fonteta’ para tratar de llegar a la final por la vía rápida.
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