El empate a cero final entre los dos equipos da buena fe de los problemas que ha tenido el equipo de Alberto Toril para lograr la victoria ante el Cacereño. Los locales empezaron el partido muy bien plantados en el primer tiempo, aunque los merengues intentaban romper la zaga contraria a base de diagonales para sus extremos Jordi y Expósito. De hecho, fue el propio Expósito el que tuvo la ocasión más clara de marcar en el primer período, pero en el mano a mano con el portero envió la pelota sobre el larguero.
La segunda parte se caracterizó por el total dominio de los blancos, principalmente por el cansancio acumulado por los cacereños. Esto permitió que el extremo Jordi se adueñara del encuentro y volviese loca a la zaga rival con sus jugadas, aunque finalmente su buen hacer no tuvo premio en el marcador. Por tanto, el equipo más goleador de la categoría se quedó sin marcar ante uno de los equipos que más goles ha encajado esta temporada, con un total de 35. De esta forma, al final se ha dado un reparto de puntos que seguramente deje muy contentos a los locales, mientras que al Juvenil A le sabrá a muy poco.
Y es que el Real Madrid ha logrado mantener el primer puesto de su grupo durante una semana más, pero en esta ocasión lo ostentará igualado a puntos con el Real Valladolid. El conjunto castellano-leonés goleó al Burgos Promesas 2000 por 4-0 en Pucela, por lo que alcanza los 48 puntos como el filial madridista. Así que la diferencia en la cabeza de la tabla la marca en estos momentos el goal-average general de los dos equipos, pues los blancos suman una diferencia favorable de 39 goles por sólo 15 de los blanquivioletas.
Imágenes por cortesía de Francisco José Aranda Moreno.
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