Crisitano Ronaldo visitó en el hospital a al socio madridista Joaquín González Muñoz, quien no puedo asistir al encuentro entre Milan y Real Madrid cuando ya tenía todo preparado para emprender el viaje. El delantero blanco, instando por la madre del joven y los amigos de éste, acudió junto al aficionado cuando peor lo estaba pasando. "Se me pusieron los ojos blancos, me costó reaccionar al ver que mi madre entraba en la habitación con Cristiano Ronaldo", asegura Joaquín, del Real Madrid desde hace casi veinte años, y añade que "me que quedé impresionado, no me lo creía. Enseguida me levanté, le di un abrazo y le presenté a mis amigos".
La madre de Joaquín, Antonia Muñoz, se había enterado de que el portugués se estaba haciendo una resonancia en el hospital y fue a buscarle. "Cristiano me dijo que mi madre se lo había pedido y que no se pudo negar", afirma Joaquín, y subraya que el delantero "es una persona muy agradable, majo y simpático. Se nota que es buena gente y que tiene un gran corazón". Pero el madridista destaca que le dio "mucha alegría ver a Cristiano, pero también ver la cara de felicidad de mi madre al ver lo contento que estaba su hijo. Eso lo gana todo. Ha sido una experiencia inolvidable".
Joaquín González Muñoz ingresó el pasado sábado de urgencia en el Hospital Sanitas La Moraleja tras sufrir una hemorragia digestiva y no pudo asistir al encuentro en San Siro. Al tener a Cristiano Ronaldo delante, Joaquín le confesó que "era el mejor jugador del mundo, el más decisivo y desequilibrante, además de mis capitanes, Casillas, Raúl y Guti. También le dije que estaba orgulloso de que defendiera el escudo de mi equipo", recuerda emocionado. El socio madridista, que es el capitán del equipo As'Pedriñas con el 7 a la espalda, recibió el alta hospitalaria y se encuentra en su casa guardando reposo. Asegura que fue baja para Milan, no podrá acudir al Calderón en el derbi del sábado, pero que su regreso será el martes ante el Alcorcón.
Fotografía: www.realmadrid.com
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