Nuevo testimonio de impacto en el 'caso Negreira'. La exmujer del gran señalado por esta nueva entrega del BarçaGate, Enríquez Negreira, ha revelado su punto de vista acerca de todo lo que ocurrió durante 18 temporadas entre su expareja y los sucesivos presidentes del FC Barcelona. María Luisa Romero ha señalado que su exmarido era una persona realmente "hermética, que nunca contaba nada".
La exclusiva con la que OKDIARIO añade más presión sobre todos los implicados en este caso tiene como punto central los supuestos pagos que Enríquez Negreira habría estado recibiendo del FC Barcelona a través de una sociedad completamente controlada por el propio colegiado y dedicada a la compraventa de artículos de papelería.
"Si recibía esas cantidades, a casa no llegaron". Esta es la conclusión de María Luisa Romero, que asegura que no notó ningún cambio radical en el estilo de vida de su exmarido durante el periodo de tiempo en el que estuvo supuestamente cobrando directamente del FC Barcelona: su tren de vida permaneció completamente inalterado, aunque confiesa que no se hubiera notado mucho la diferencia: "cuando ha tenido dinero, se lo ha aspirado. Ha sido derrochador, pero también ha sido de ayudar mucho. Se tenía que haber ayudado a sí mismo".
Su testimonio podría ser clave en la investigación
El hermetismo que Negreira tenía respecto de sus negocios parecía estar circunscrito única y exclusivamente a María Luisa Romero, puesto que el hijo de Enríquez Negreira, Javier, también fue partícipe en las actividades que hacía su padre a cambio de los pagos que hacía el FC Barcelona. La exmujer de este antiguo colegiado señala que "nunca me llegó a decir nada de lo que hacía, vivía libremente sin dar explicaciones a nadie".
Con estas palabras, se acumula un nuevo testigo que podría ser usado durante una investigación judicial respecto de este asunto y que cada vez más se perfila como una posible solución a unas informaciones que ponen en tela de juicio el buen hacer y manchan la reputación de los árbitros españoles y uno de los clubes más grandes de nuestro país, algo que no se puede consentir y que debe ser apropiadamente castigado en caso de que finalmente sea demostrado judicialmente.
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