Desde la Ciudad Condal no han aclarado nada, más allá de echar balones fuera y de intentar desvincularse de cualquier acto que pueda ser interpretado como ilegal y les pueda perjudicar.
Pero siguen apareciendo nuevos datos y testimonios que les dejan en un mal lugar. La última en hablar ha sido la ex mujer de Enrique Negreira, quien ha disparado un dardo envenenado.
Y es que, ha asegurado que "mi hijo está pagando los pecados de su padre...". Parece que le culpa, aunque no se ha quedado ahí y ha lanzado más mensajes que no gustarán en Barcelona.
Ha asegurado que Enrique le decía a su hijo: "Oye, que viene fulanito de tal y cual, acompáñalo al hotel, que luego voy yo y comemos". Por lo tanto, Negreira se reunía con los árbitros que iban a pitar a Barcelona, antes de los partidos.
También ha querido insistir que su hijo "tan sólo cumplía órdenes de su padre". Por lo tanto, no sólo coloca a Negreira con los árbitros antes de pitar en el Camp Nou, sino que le señala como culpable de todo.
El escándalo ha estallado, y cada nuevo dato que conocemos, deja más señalado a Negreira y al Barcelona. Esos pagos, que han intentado ocultar durante tantos años, ya no se sostienen.
Las investigaciones continúan, intentado esclarecer un caso que ya avergüenza al futbol español, y que a nivel mundial también deja muy tocada a la competición ante este escándalo.
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