No voy a reavivar el debate sobre si Carvajal debió haberse quedado en el club blanco el pasado verano. Eso es agua pasada y, como tal, ya no se pueden cambiar ni las opiniones ni las decisiones pero, eso sí, mi reflexión es que si la progresión de este chaval de Leganés es la que ha venido demostrando en estos primeros meses de competición en Alemania, el Madrid no debería tardar ni 10 segundos en recomprarle para que forme parte, y esta vez ya sí de pleno derecho, de la primera plantilla del conjunto blanco 2012-13.
Carvajal ha jugado los 90 minutos de los últimos seis partidos de la Bundesliga del Leverkusen. Ha marcado un gol y ha dado tres asistencias en la competición alemana, y está mejorando su faceta defensiva. Bien es cierto que nunca será un lateral defensivo, pero esa pequeña debilidad atrás la suple con creces en lo que se refiere al aspecto ofensivo. De hecho, en el Europeo Sub-19 de hace unos años, Carvajal era el suplente de Blázquez, hasta que le arrebató el puesto gracias a sus subidas por la banda y a la profundidad que le da al ataque.
Bien es verdad que ni siquiera el Leverkusen puede compararse al Real Madrid, pero no es menos cierto que Carvajal está haciéndose un hombre en Alemania, está ganándose la confianza de su técnico en un país que no conocía, con un idioma ajeno al suyo y unas costumbres muy diferentes a las del fútbol español. Por eso, creo que si piecitos sigue con esta progresión, la primavera-verano debería traerle dos grandes noticias: la convocatoria para el Europeo Sub21 de Israel y su vuelta al Real Madrid para la temporada 2012-13.
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