Es el hombre que hace jugar al mejor equipo del mundo, su visión de juego y su calidad son puro caviar para los aficionados del Real Madrid. Cada vez que le ven en el Santiago Bernabéu, asisten a una clase maestra de un jugador único y sobre todo humilde.
Se trata de Luka Modric, el centrocampista del Real Madrid es el mejor del mundo en su puesto. Sus pases medidos con el exterior son una marca de identidad de la calidad que atesora el croata. Modric es uno de los elegidos dentro del mejor once del año por la UEFA y está viviendo sus mejores momentos como jugador de fútbol. Todo son buenas noticias y en el primer partido de Liga del año ante el Granada, no iba a ser menos. Con su participación en el partido, Modric suma ya 190 partidos oficiales con la camiseta del Real Madrid.
El talento va unido a la humildad de Luka, quién además es ambicioso en cuanto a seguir ganando títulos. Modric lo ha ganado todo con el Real Madrid desde su llegada en 2012: una Supercopa de España, una Copa del Rey. En cuanto a títulos internacionales, el palmarés es envidiable: dos Champions, dos Supercopas de Europa y dos Mundiales de Clubes. Tan sólo le falta la Liga, una obsesión para él y que seguro conseguirá.
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