Zidane comentó al acabar el partido ante el Atlético de Madrid que en el gol de Griezmann pudo haber falta de concentración, un factor al que se le pueden atribuir muchos elementos. O bien cansancio del equipo o bien que no se llegó al final del partido con la claridad de ideas necesaria en este tipo de partidos.
Sea cual sea la razón, lo que es incuestionable es que el Real Madrid no corrió lo suficiente ante los de Simeone. Bien es verdad que ganó sobradamente la posesión, con más del 60%, y es que el juego en el centro del campo con Kroos, Modric llevando la batuta se notaba y para ello el Atlético de Madrid tenía que perseguir y correr un balón al que no llegaban. Por esta razón, el club rojiblanco completó una totalidad de 113 kilómetros recorridos mientras que el Real Madrid se quedó en 103. El hecho de tener el balón implica que el que corra sea el rival, por eso el premio del empate fue demasiado pese al dominio madridista en gran parte del partido. El jugador del Real Madrid que más corrió fue Luka Modric con 10,39 kilómetros, seguido de Casemiro y Carvajal.
El jugador que más distancia recorrió fue Koke con hasta 12,81 kilómetros en sus piernas, seguido de Gabi y Griezmann. El centrocampista español además estuvo en todos lados, recuperó hasta 11 balones y dio 59 pases correctos de 65. Una muestra de que, tal y como reconoció más tarde Sergio Ramos en zona mixta, el equipo no había sabido sufrir juntos al final.
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