No fue ni mucho menos un fichaje sencillo, hasta el 31 de agosto no se concretó la llegada de Gareth Bale a las filas del Real Madrid y lo cierto es que las negociaciones fueron del todo menos fáciles. El jugador se llegó a poner el rebeldía, a no entrenar con el equipo y a forzar lo máximo posible, pero su club también.
En una entrevista al diario inglés Mirror, el director deportivo del Tottenham, Darren Eals ha detallado lo duras que fueron las negociaciones entre ambos clubes. En especial destaca la figura del presidente, Daniel Levy: "Con él involucrado fue un trato muy complicado, estaba presionando por cada centavo". Afirmó además que las negociaciones pasaron por muchos momentos, tan pronto estaban paradas como de repente volvían a resucitar. Finalmente el desenlace es el que ya todo el mundo conoce, Bale cumplió su sueño de vestir de blanco y con ello alcanzar el gran nivel que mantiene hoy en día.
Una operación sin precedentes en aquel momento por su valor y que estuvo llena de impedimentos, porque hasta la moneda con la que se iba a realizar el traspaso (euros o libras), fue un problema entre Levy y el Real Madrid, como reconoció el propio Eals. Una situación de tensión máxima que en esta ocasión si tuvo un final feliz para el jugador y para el Real Madrid.
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