Muchos sentimientos encontrados habrá mañana sobre el césped de Mendizorroza. El Real Madrid rinde visita al Deportivo Alavés en un choque delicado para ambos conjuntos pero en el que se entremezclarán sensaciones extrañas especialmente para un futbolista. Ese no es otro que Marcos Llorente, que vuelve a su segunda casa, al campo donde tanto consiguió brillar la pasada temporada.
Marcos Llorente deslumbró a la Liga el curso pasado con sus grandes actuaciones en el Deportivo Alavés y tal fue su brillo en el centro del campo vitoriano que eso le valió para culminar su fichaje por el Real Madrid. Ahora, el joven centrocampista vuelve vestido de blanco para jugar ante la que el año pasado fue su afición y a la que tantas alegrías le dio, entre otras cosas, al guiar a su equipo a la final de la Copa del Rey, algo prácticamente inimaginable.
¿Titular?
Y más especial puede convertirse el partido para Marcos Llorente ya que llega con más probabilidades que nunca de ocupar un puesto en el once inicial. La enfermería del Real Madrid se encuentra a rebosar y entre los ausentes están dos jugadores que suponen competencia directa para Llorente, como son Kovacic y Toni Kroos, por lo que Zidane tan sólo tendrá a dos mediocentros puros como son Modric y Casemiro. Así las cosas, una de estas plazas ausentes la podría ocupar Llorente, que a buen seguro estará extramotivado en su regreso a Mendizorroza.
Además, el Madrid tiene otras bajas como las de Benzema, Theo o Marcelo que obligarán a Zidane a tener que tirar de fondo de armario para poder confeccionar un once titular en Vitoria, y eso hace que las posibilidades de Llorente sigan creciendo exponencialmente.
El mal momento del Alavés
El Alavés parece haber acusado la baja de Marcos Llorente y otras tantas ya que no levanta cabeza en este inicio de Liga. Los vitorianos llegan en la cola de la clasificación ya que en estos cinco partidos que han disputado hasta el momento todavía no han logrado sumar, es decir, que cuentan sus cinco compromisos por derrotas. Y tan mal van las cosas en Vitoria que los blanquiazules ni siquiera han conseguido anotar un único gol.
Partido especial para los Zidane
Será una sensación extraña para un tipo tan familiar como Zinedine. El entrenador del Real Madrid querrá por primera vez en la vida que las cosas no le vayan bien del todo a su hijo Enzo ya que mañana se enfrentará a él en un partido oficial. Así son las cosas del fútbol, que a veces hace que los intereses de una misma familia se vean contrapuestos.
Y es que el choque que jugarán mañana el Real Madrid y el Deportivo Alavés en Mendizorroza (16:15 horas) será muy especial para la familia Zidane. Y también podría ser incluso crítico dadas las delicadas situaciones en las que llegan tanto uno como otro conjunto a este enfrentamiento. El padre, al frente del conjunto madridista se tendrá que ver las caras con su hijo Enzo, que este verano salió de la casa blanca rumbo al Alavés en busca de minutos y seguir desarrollándose como futbolista. Y aunque tendrá menos protagonismo, también habrá un tercer miembro de la familia Zidane implicado, ya que Luca cuanto menos viajará a Vitoria para ser el tercer portero madridista.
Un partido que reúne a tres elementos de una misma familia que buscarán por primera vez intereses contrapuestos. Y el choque tiene su miga. El Real Madridsabe que no se puede permitir ni un solo despiste más en este arranque liguero después de los malos resultados que está cosechando en el Santiago Bernabéu. La derrota entre semana ante el Real Betis le ha alejado demasiado de la cabeza de la competición y un nuevo traspié podría hacerle ver el liderato demasiado lejos para las alturas de la temporada a la que nos encontramos.
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