El Madrid pasa del 'cielo' al 'infierno' en el OAKA

El Real Madrid de Baloncesto pierde 82-80 frente a Panathinaikos


Luka Doncic, basket

Luka Doncic




Dos palabras definen la primera parte realizada por el Real Madrid de Pablo Laso en el OAKA: equipo coral. Los blancos bordaron el baloncesto, bajo una extraordinaria dirección de Luka Doncic, con un enorme acierto en el tiro, con un Trey Thompkins que ya está de vuelta en Europa de cuerpo pero también de espíritu y con un Rudy Fernández que cada partido que pasa ilusiona más al madridismo. El balear ha recuperado su mejor versión anotadora. Felipe tampoco falló por dentro y el Real Madrid aniquiló a Panathinaikos con un excelente 13/17 en tiros de dos y un más que notable 6/11 en tiros triples.

Los griegos comenzaron con fuerza, castigando por dentro con Gist, pero el Madrid ajustó la defensa, cerró el rebote, corrió como más le gusta y mató encontrando las mejores posiciones en el tiro. Doncic dejó jugadas para disfrutar en los ‘highlights’ y el OAKA se quedó mudo en muchas ocasiones. El Real Madrid bordaba el basket y se marchaba 14 arriba al descanso.

Del todo a la nada en la segunda parte

Pero el panorama cambió de manera radical en la segunda parte. La defensa de Panathinaikos, y por qué no decirlo, un arbitraje ‘made in Euroliga’ de Lamonica y sus secuaces echó por tierra todas las opciones de un Real Madrid que se fue suicidando poco a poco, ataque a ataque, defensa a defensa. Gist, Calathes y Rivers destrozaron al equipo blanco. KC estuvo brillante por fuera-20 puntos con cuatro triples en la segunda parte- y el Madrid no encontró soluciones para cerrar el rebote. Las segundas oportunidades mataron al equipo de Pablo Laso.

Y cuándo este Madrid no funciona atrás, las cosas en ataque se ponen también feas. Luka Doncic estuvo errático y fallón en los momentos decisivos-salvo un triple a una pierna para poner un esperanzado 77-77-, Felipe no fue suficiente por dentro, Tavares perdió hasta tres balones seguidos y el aro se cerró por fuera. Panathinaikos consiguió remontar pese a que Thompkins tuvo el último tiro para darle el triunfo a los madridistas. 82-80 y el Madrid que cosecha una nueva derrota fuera de casa. Próxima parada: Estrella Roja en el Wizink Center en siete días.