El carácter del portugués es una garantía para el club que decida realizar una 'limpieza' en su vestuario. Mou llegaría con mando en plaza y con la misión de 'cargarse' a varios pesos pesados del vestuario. El Real Madrid necesita regenerarse. Pese a haber ganado la Liga de Campeones el pasado año, al equipo ya se le vieron las costuras en la Liga y en la Copa. En el torneo de la regularidad, el Barcelona le sacó 17 puntos a final del campeonato y en la Copa, los de Zidane cayeron de manera inaudita y lamentable contra el Leganés en los cuartos de final. Por ello, el apartado de bajas sería el más sonado con la llegada del de Setúbal. El inicio de esta temporada con Julen Lopetegui no ha hecho sino afianzar todavía más el pensamiento de la planta noble madridista...
Mou haría una limpieza de arriba a abajo
Con el portugués al mando, la plantilla sufriría no menos de ocho cambios importantes de cara a la próxima temporada. Nombres como Bale, Modric, Sergio Ramos, Marcelo, Benzema, Ceballos o Keylor Navas tendrían muchos problemas para seguir de blanco. En el caso del galés, Mou considera que no da la talla como referencia 'crack' en la delantera, la relación con Ramos y Marcelo se rompió en la última temporada de su primera etapa y, sobre el propio lateral brasileño, Mourinho siempre ha tenido una opinión muy formada: "ataca muy bien pero es uno de los peores defensas que existen"..
En la medular, al luso le gustaría contar con jugadores de mayor vigor físico y con un futuro por delante. A Mourinho no le agrada Ceballos-quiere jugadores más verticales-y considera que los tiempos de Luka Modric ya pasaron-él le fichó en 2012 pero el Real Madrid necesita nuevos futbolistas bandera en la medular-. Por último, con el fichaje de Courtois ya realizado esta temporada, Keylor no tendría sitio. Mourinho no quiere dos porteros top, no quiere que se repitan situaciones como la vivida con Casillas en su último año de contrato.
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¿Qué jugadores le gustan para 'rehacer' la plantilla?
Cinco son los futbolistas que más 'apetecen' a Mourinho para apuntalar la zona de influencia blanca. El técnico del Manchester United tiene claro que sí regresa al Real Madrid pedirá al menos la llegada de un jugador top en cada línea: central, centrocampista, creador de juego y delantero centro. Los nombres que más le atraen: Koulibaly, Kanté, Eriksen, Mbappé y Mauro Icardi.
Evidentemente, lograr el fichaje de estos cinco jugadores no sería sencillo precisamente. El Real Madrid tendría que vender por valor de 300 millones de euros al menos para cuadrar unas cuentas que acabarían 'tiritando' por el gasto en refuerzos. Neymar no llegaría por menos de 250 millones, Icardi costaría unos 100 'kilos', Kanté no menos de 70 millones y Eriksen tres cuartos de lo mismo. Seguramente, Florentino no podría entregarle todo el lote de regalo en un solo año.
El 4-2-3-1, su sistema preferido
Cuatro defensas, dos mediocampistas-uno de ellos más trabajador-, un mediapunta y dos extremos o dos delanteros acompañando a un delantero centro. A Mourinho le gustan los equipos verticales, que presionan arriba o que saben replegar y defender en bloque cuando el rival de enfrente así lo exige. Mourinho sigue trabajando la estrategia como uno de sus grandes baluartes para ganar partidos y el contragolpe sigue siendo su gran seña de identidad.
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La espina clavada de Mourinho en el Madrid
José Mourinho recuperó al Real Madrid competitivo para la Liga de Campeones pero no pudo culminar su obra. Tres semifinales malditas le dejaron fuera de la finalísima y de la posibilidad de poder apuntarse la que hubiera sido la tercera Copa de Europa de su palmarés. Desde que Mou aterrizara en Chamartín, el Madrid no se ha bajado de las semifinales durante ocho campañas consecutivas.
El Barça, previo robo arbitral, el Bayern en los penaltis y el sorprendente Dortmund de Lewandowski, Reus o Mario Götze le privaron de intentar ganar la 'Orejona' como técnico blanco. Mourinho quiere resarcirse porque él sabe que ganar la Copa de Europa con el Oporto o el Inter no es lo mismo que hacerlo con el Real Madrid.
La relación con la prensa: la gran preocupación del club
El Real Madrid es consciente que una apuesta como la de Mourinho tendría riesgos. El primero, su abrupta y habitual relación de amor-odio con sus futbolistas y, el segundo, la facilidad del portugués en entrar en guerras mediáticas con la prensa. Florentino Pérez no quiere que se repitan ciertos episodios que perjudicaron mucho la imagen del Real Madrid en el pasado.
Por ello, si el club apuesta finalmente por el de Setúbal, Florentino intentará que Mourinho se comprometa con todas las letras para intentar llevar una relación correcta con el sector periodístico español. En todo caso, lograrlo sería casi imposible porque entre los medios que siguen el día a día al conjunto blanco hay una enorme sed de venganza contra el actual entrenador del Manchester United....
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