Ayer se volvió a ver a un Madrid muerto en lo mental, incapaces de sacar el balón jugado y tampoco se vieron muchas ganas de ello, se sumó la incapacidad táctica del francés al poco hambre que tienen los jugadores desde principios de la pasada campaña.
Jugadores que han ganado tanto es normal que tengan un serio problema de motivación de cara a aceptar nuevos retos, y más, si Zidane no está haciendo la revolución de la que se ha estado hablando desde que acabó la pasada campaña.
Si les faltaba ese apetito el año pasado en Liga imagínense ahora en pretemporada jugando un ‘bolo’ veraniego, pero una noche que sin que ellos quizás sean muy conscientes desde dentro, han humillado a toda la afición madridista tras haber encajado, ni más ni menos, que 7 goles por parte de sus rivales.
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