El ex técnico del Barça mostró su verdadera cara cuando, en lugar de apoyar a un compañero de profesión, defendió los cánticos racistas del Camp Nou hacia Roberto Carlos en 1997.
Pep, Camp Nou y Roberto Carlos
3 de abril de 1997. Roberto Carlos explica ante los medios de comunicación que, cuando el Real Madrid se enfrentó al Barcelona en el Camp Nou, recibió insultos racistas. La grada del conjunto azulgrana expresaba ruidos y gestos propios de los "monos" intentando incomodar al lateral brasileño que, por aquel entonces, acababa de firmar con el Madrid. Estos episodios no le habían sucedido anteriormente en otros estadios de España y Roberto Carlos así lo aseguró a la prensa que, acto seguido, preguntaría a Pep Guardiola sobre los hechos.
En el archivo que ha rescatado
Movistar Fútbol, sorprende la hipocresía del ex entrenador del
FC Barcelona (por aquel entonces futbolista del primer equipo).
Pep siempre se las ha dado de una persona tolerante, responsable y un tanto justiciera (solo cuando le conviene). En lugar de defender a un compañero de profesión que estaba siendo víctima de cánticos racistas en el
Camp Nou,
Guardiola 'echó más leña al fuego' y se permitió el lujo de criticar a
Roberto Carlos.
(Guardiola se 'hunde' en la Premier y se 'rinde' en la Champions)Es realmente hiriente ver la sonrisa que despoja
Guardiola, con un tremendo aire de superioridad, cuando le preguntan sobre el tema. Solo defiende a los suyos y a los que piensan como él. El
Camp Nou llamó abiertamente "mono" a
Roberto Carlos y, con su hipocresía característica, en lugar de defender los actos racistas, contestó: "Habla mucho ese señor. Habla demasiado. Lleva todo el año hablando mucho en ese sentido. No conoce a esta afición y lleva pocos meses aquí como para calificar esas cosas".
Como podemos ver, la actitud de superioridad de
Guardiola no es nueva, pues desde sus inicios ha demostrado la poca clase que tiene, y es que ni en los momentos más complicados ha sabido poner un poco de cordura a la situación. Ahora conocemos que
Pep no sólo es hipócrita, sino que también es racista y defiende cosas que no tienen perdón. Algún día se dará cuenta.
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