Los azulgranas, escandaloso robo arbitral mediante, consiguieron el triunfo ante una exhibición individual de Nabil Fekir, un jugador que siempre ha gustado a Zinedine Zidane. El centrocampista francés se erigió como el gran protagonista del choque por su recital y por marcharse al vestuario antes de tiempo tras ser expulsado. (Zidane premia a la plantilla tras la reacción y victoria en El Sadar)
El ex del Lyon, haciendo galo de su enorme talento con el balón en sus botes, fue un auténtico quebradero de cabeza para la defensa del Barça. Apenas habían transcurrido cinco minutos y, tras una enorme cabalgada, se plantó en el área, disparó y solo Lenglet, con un paradón, evitó el que pudo ser el 1-0, cuarto penalti que provoca en la temporada y que transformó Canales.
Su ‘show’ no había hecho nada más que comenzar. El campeón del mundo galo puso al servicio del Betis todo su repertorio de conducciones, regates y pases milimétricos para abrir la defensa culé. Sus compañeros no supieron aprovecharlo, asique tuve que encargarse él mismo de poner de nuevo por delante a los verdiblancos con un latigazo abajo imposible para Ter Stegen. Ya suma seis goles y tres asistencias.
Lo consiguió de ‘milagro’ porque Arturo Vidal casi le deja KO tras una dura entrada. El chileno vio la amarilla como también lo hizo Sergi Roberto, incapaces ambos de pararlo por lo civil. Así, Fekir acabó ‘harto’ y, tras una falta a Lenglet que le costó la amarilla, protestó y vio la segunda amarilla. Expulsado por Sánchez Martínez en un Villamarín clamando contra la decisión arbitral.
Ese fue el peor punto final a un partido memorable de Fekir y que no ha pasado desapercibido para le entorno de Zinedine Zidane. El técnico francés siempre ha mostrado predilección por este futbolista (esto dijo hace una temporadas: “Es un jugador increíble. Tiene un toque de balón impresionante y parece tener mucha personalidad. Técnicamente me impresiona mucho”) y, tal y como ha podido saber Defensa Central, ha ‘alucinado’ con lo que le han contado su actuación ante el Betis. No la ha visto, pero sí es consciente de ella.
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