El club blanco podría tener hasta seis jugadores (Militao, Reinier, Vinicius, Rodrygo, Kubo y Bale) extracomunitarios, mientras que la FIFA apenas permite tres por equipo, ley que obliga al Madrid, más concretamente a Zinedine Zidane, a tomar decisiones importantes.
El técnico francés cuenta con los cuatro brasileños (el club espera que Vinicius consiga la nacionalidad española), mientras que el japonés, ahora en el Mallorca, tendrá que buscar otra cesión. Enfrente, no cuenta con el galés, que deberá buscarse una salida después de que no fructificara en verano.
Sin embargo, el Madrid aún podría haberse topado con otro jugador extracomunitario: Eduardo Camavinga. El centrocampista del Rennes, uno de los favoritos para reforzar la medular, nació en Angola antes de crecer como persona futbolista y futbolista en Francia.
Afortunadamente para los intereses del club blanco, el polivalente medio recibió el 5 de noviembre del 2019 la nacionalidad francesa después de que los trámites se acelerasen por una razón muy especial. (Noticia DC: Camavinga podría lucir su dorsal favorito en el Madrid)
La Selección gala quería que Camavinga recibiera la nacionalidad francesa para que no pudiera debutar con otro combinado nacional y Francia se asegurara su concurso. Dicho y hecho. El jugador es un habitual de las categorías inferiores y está muy cerca de debutar con la absoluta de Didier Deschamps. A este nivel, lo hará de inmediato.
De esta forma, si el Madrid consigue su fichaje, no tendrá que reinventarse para hacerlo hueco en la plantilla con el resto de extracomunitarios. Un ‘favor’ que recibió Camavinga el año pasado y que ahora ayuda al club blanco con otro problema.
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