El francés confía en que algunos como Casemiro y Benzema solventen sus problemas físicos para jugar el próximo miércoles en Champions.
Tras el pinchazo ante el Villarreal, el Real Madrid ya se prepara para uno de los partidos más importantes de la temporada. Conseguir los tres puntos en San Siro supondría prácticamente sellar el pase a octavos de final de la Champions. Aunque inevitablemente Zizou tendrá bajas importantes como las de Ramos o Valverde, sí espera recuperar a algunos de los futbolistas que no estuvieron en La Cerámica.
Uno de ellos es Karim Benzema. El francés no superó las molestias del partido de Mestalla y se quedó fuera de la convocatoria en la última jornada. No tiene nada grave, pero prefirió descansar para poder estar en óptimas condiciones en Champions.
Este domingo se ha entrenado en solitario, tanto dentro como fuera de las instalaciones. Zidane le ve bien y cree que en los próximos días ya podrá estar con el grupo y no habrá problemas para que sea titular. En el hipotético caso de que no llegara, Mariano sería el 9', ya que Jovic no estará por coronavirus.
Y el otro caso, pero no por ello menos importante, es el de Carlos Henrique Casemiro. Un indiscutible para Zizou que tampoco jugó en Mestalla, ni en La Cerámica, dónde curiosamente el equipo se dejó puntos. El brasileño es la columna vertebral del equipo y su ausencia, como la de Ramos, se nota demasiado.
Pese a que Sergio Ramos trabaja a contrarreloj porque no quiere perderse la cita contra el Inter, es demasiado arriesgado. El capitán es un portento físico, pero los servicios médicos del club le han aconsejado que se olvide de la Champions y se recupere bien para no tener mayores problemas en el futuro.
Por supuesto estará Carvajal, que ya jugó los noventa minutos en La Cerámica. El canterano cuajó una gran actuación (dio la asistencia a Mariano) y no se le notó falta de ritmo. Todo lo contrario, ha vuelto mejor que antes de la lesión, dónde no pasaba por su mejor momento.
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