El Real Madrid visitaba Alcoy para disputar su primer partido de Copa del Rey. Partido complicado el que tenían los pupilos de Zidane por delante ante un Alcoyano que seguro iba a dar guerra. A partido único, el resultado siempre es impredecible y nunca se sabe quien será el que accederá a los octavos de final. Exigente papeleta para los merengues ante los alcoyanos.
Zidane iba a salir con el esquema habitual: 4-3-3. Andriy Lunin en portería, defensa de cuatro con Odriozola, Militao, Chust y Marcelo. Los tres centrocampistas iban a ser Casemiro, Valverde e Isco. En la delantera, Vinícius, Mariano y Lucas Vázquez.
El Madrid empezó el partido como claro dueño del balón. Posesiones muy largas del Madrid, pero con una circulación de balón un tanto lenta. El equipo recuperaba el balón con relativa facilidad impidiendo las transiciones ofensivas del Alcoyano. El dominio posicional era evidente, pero las ocasiones seguían sin llegar. La movilidad en tres cuartos de campo del Madrid estaba siendo nula y los espacios eran mínimos.
La primera parte finalizaba con el Madrid por delante en el marcador (0-1) pero atascado en ataque. Los extremos apenas estaban teniendo profundidad en ataque y los centrocampistas estaban siendo incapaces de filtrar balones para los atacantes. Zidane decidía no modificar nada al descanso, a pesar del pobre peso ofensivo de algunos de sus jugadores.
El equipo blanco estaba bastante sólido en defensa y las únicas oportunidades del Alcoyano procedían de libres directos. La segunda parte se estaba desarrollando igual que la primera. El Madrid tenía el dominio posicional y el del balón, pero los hombres de ataque de Zidane apenas estaban interviniendo. Muy poco de Vinícius, muy poco de Mariano y muy poco de Isco en la segunda parte. Los atacantes del Madrid estaban teniendo un peso nulo en ataque y la defensa local apenas sufría. Lo comentado. El libre directo era el arma principal de los locales y en el ochenta lo demostraron. Córner muy bien tocado, buena peinada en el primer palo y en el segundo palo Solbes remataba a quemarropa. El equipo no consiguió el gol y el partido se marchó a la prórroga.
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