El tarro de las esencias se destapó en el minuto 14 cuando Karim Benzema remató con un taconazo soberbio al fondo de la portería del Barça un gran pase de la muerte de Lucas, habilitado en la derecha tras una carrera de Fede, que rompió líneas con la pelota en los pies deshaciéndose de varios rivales.
El delantero francés demostró que tiene una calidad por encima de la media y adelantándose a Araujo en el primer palo remató de la única forma posible, de tacón, sorprendiendo a Ter Stegen y firmando sin duda uno de los goles más bonitos que se recuerdan en un Clásico.
Benzema volvió a ser protagonista, una vez más, de otro tacón para la historia después de que hace 10 años protagonizara junto a Guti una escena que aún hoy permanece en la retina del madridismo. Entonces, fue el mítico 14 quien asistió a Karim de tacón para que marcara. Ante el Deportivo en Riazor, el francés anotó pero el mérito fue para Gutiérrez.
Karim Benzema vuelve a marcar en un Clásico
Ante el Barça, nadie podrá quitarle méritos a Karim, que encadenaba nueve Clásicos consecutivos sin ver portería. En esta temporada en la que está marcando la diferencia a base de goles, el francés se reencontró con el gol y lo hizo de una forma preciosista.
Benzema no había marcado en un Clásico desde el 16 de agosto de 2017, en la vuelta de la Supercopa de España. El equipo blanco ganó aquel día por 2-0 y consiguió levantar el título ante los culés. Antes que Karim, había marcado Marco Asensio. Y en la ida, el Madrid había ganado 1-3.
El delantero francés ha marcado ya 10 goles y repartido 9 asistencias en los Clásicos, un partido en el que ya es todo un especialista después de haber disputado hasta 36 choques ante el Barça.
Posiblemente, ninguno de los goles de Benzema ante el FC Barcelona había sido tan bello como el anotado este sábado, que sirvió al Real Madrid para abrir la lata y sumar tres puntos de oro en la lucha por el título de Liga.
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