El Real Madrid recibió una cifra récord de peticiones de entradas para ver la final en directo en París. Las peticiones alcanzaban las 60.000 entradas para únicamente las 20.000 disponibles del equipo blanco.
Esta ilusión ha ido más allá y el club anunciaba que abría el estadio para poder ver el encuentro en pantallas gigantes dentro del propio estadio. Para entrar, se debía adquirir entradas a un precio que alcanzaban los 10 euros para público general y 5 euros para los titulares del carné madridista.
Nuevamente las entradas para ver la final volaron y esto ha provocado que surja el negocio ilegal de la reventa de entradas. Una reventa que está alcanzando precios estratosféricos.
Reventa por las nubes
Según se puede ver en páginas de segunda mano y de venta y compra de productos, la reventa de las entradas se sitúa en los 85 euros, aunque en ocasiones alcanza o supera los 100 euros. Un precio muy elevado para ver la final en el Bernabéu.
En cambio, los precios de reventa para asistir in situ en la final de París se disparan y se llegan a pedir 2.500 euros por un ticket para acceder al estadio. Un riesgo puesto que los expertos y la UEFA han advertido que se pueden producir timos en la reventa y que habrá importantes controles.
Recordemos que todas las entradas de los socios del Real Madrid son nominativas y cada persona deverá acceder con su entrada y DNI que verifique que el nombre de la entrada corresponde.
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