Fuentes conocedoras aseguran a Defensa Central que no hay nada con el sueco. Se trata de un buen futbolista, al que se intentó fichar en edad de juvenil, pero que acabó rechazando esta posibilidad. Ahora vive de una actuación estelar contra el Real Madrid (febrero de 2020 en Copa del Rey) en la que marcó un doblete y dejó fuera a los de Zidane.
El delantero también se ha aprovechado del apodo que le pusieron en su país desde bien joven. La posibilidad de convertirse en "el nuevo Ibrahimovic" le abrió infinidad de puertas y, aunque su calidad está fuera de toda duda, los números no le respaldan. Acumula 42 goles en 130 partidos en San Sebastián.
Cierto es que llegó a existir un interés por el delantero tras su exhibición en el Bernabéu, pero no pasó de contactos superficiales sin ofertas de por medio. El Dortmund seguía teniendo una opción de recompra por 30 millones de euros, pero finalmente la Real llegó a un acuerdo económico para que no la hiciesen efectiva.
Precio injustificado
El Real Madrid no se plantea la incorporación de Isak. En primer lugar porque no le consideran un futbolista top y menos que valga 90 millones de euros. En Anoeta se apresuraron con la renovación por miedo a que se marchase tras "una buena Eurocopa", en la que no marcó ni un solo tanto.
Tras el chasco con Jovic, delantero que venía de marcar 27 goles y 7 asistencias en 48 partidos antes de firmar por el Real Madrid, la entidad se pensará más de dos veces operaciones de este calibre. Benzema es el mejor del mundo y aún le queda cuerda para rato. La llegada de un futbolista galáctico tendrá que esperar.
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