El primer partido que tendrá el conjunto blanco, tras la Copa del Mundo de Qatar 2022, será en el estadio José Zorrilla, en un duelo ante el Real Valladolid, el próximo 30 de diciembre.
Sin embargo, lo que de verdad preocupa al entrenador italiano es la saturación del calendario entre los meses de enero y febrero, algo que ha ido a más con la confirmación del Mundial de Clubes de la FIFA.
El club blanco jugará esta competición del 1 al 11 de febrero, momento en el que los dirigidos por Carlo Ancelotti buscarán ampliar aún más su diferencia como el equipo más ganador del torneo, pero el real problema para los madridistas va más allá de lo que ocurra sobre el terreno de juego.
Los dirigentes blancos son conscientes, desde hace meses, de lo exigente que será el calendario la segunda parte de la temporada.
Las fechas del Mundial de Clubes no han gustado nada a los responables del Real Madrid, sobre todo porque se deberán jugar el título, posiblemente contra el Flamengo, 10 días antes de visitar Anfield, algo que ha argumentando, sin éxito, el equipo merengue a Gianni Infantino, aunque esto no es todo.
El equipo merengue aún no conoce las fechas exactas de su participación, pero la FIFA obliga a todos los participantes a estar tres días antes del primer partido, lo que generará que los de Carlo Ancelotti deban mover la Copa del Rey y aplazar un duelo de LaLiga, que será, previsiblemente, el enfrentamiento contra el Valencia.
Ahora mismo el calendario no cuenta prácticamente con espacios disponibles, por lo que el Mundial de Clubes e Infantino le han generado un problema muy gordo al Real Madrid.
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