Antonio Silva es uno de tantos nombres que el Real Madrid monitoriza constantemente. Su éxito desde que fue ascendido al primer equipo del Benfica ha llamado la atención de varios directivos del conjunto blanco, que han sondeado la posibilidad de entablar negociaciones con las 'águilas' para intentar llegar a un acuerdo en caso de que Silva tuviera hueco en el primer equipo.
La respuesta de los directivos lusos ha sido igual de corta que de tajante: no hay espacio para la negociación. El único requisito que se necesita para contratar los servicios de Antonio Silva, según los portugueses, es abonar el dinero de la cláusula de rescisión que tiene el futbolista actualmente: 100 millones de euros. A pesar de que muestra mucho potencial y promete como futbolista, no merece la pena.
Esa es la decisión a la que han llegado desde las oficinas del Bernabéu. Aunque Antonio Silva se está configurando como una propuesta brillante y tenga mucho futuro por delante, también es cierto que tiene demasiado que demostrar para que un equipo grande, al menos el Real Madrid, vaya en serio a por él. La dificultad de la negociación, que impide llegar a un acuerdo para sortear la cláusula, complica este asunto todavía más.
Nacho tiene la 'culpa'
Estos 100 millones que ha puesto el Benfica para la cláusula de Antonio Silva parece un precio excesivo en las oficinas del Santiago Bernabéu, y ninguno de los directivos está a favor de desembolsar tanto dinero por un jugador por el que prácticamente nadie se ha interesado y que tampoco genera mucho 'runrún' en los medios de comunicación de Portugal.
Antonio Silva, además, es solo una de las opciones para reemplazar a Nacho en caso de que el one club man decida no renovar su vínculo con la entidad madridista a final de temporada: esta es una situación que lleva varios meses siendo una preocupación en el Real Madrid, que teme no disponer de defensas suficientes y no está completamente seguro de contar con Jesús Vallejo para las próximas temporadas.
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