Los dirigentes del club blanco no se detienen, pese al parón de selecciones, ya que son muchos los temas que tienen por resolver.
El futuro de Vinícius Tobías y de Iker Bravo, quienes están a préstamo en el Real Madrid Castilla, es algo que inquieta al madridismo.
Sin embargo, el caso del lateral brasileño, que gusta mucho en las oficinas madridistas, parece mucho más claro, algo que no variará, siga o no Carlo Ancelotti.
De hecho, el jugador puede estar tranquilo ahora mismo, ya que le han confirmado que el hecho de que se quede en el club blanco no va a depender de la continuidad del primer entrenador, sobre todo porque será una decisión y una gestión de la entidad.
En este sentido, la idea es ficharlo definitivamente siempre que el Shakhtar Donetsk baje el precio de compra que se estableció en la decisión.
El precio de salida inicial ascendía a casi 18 millones de euros y el Real Madrid intentará reducirlo a 8 obligatorios y 10 por bonus para poder acometer la operación a final de este curso.
Los responsables deportivos de la entidad madridista consideran que el éxito en el futuro de Vinícius Tobías está prácticamente asegurado, ya que en su juego destacan varios aspectos, además de su velocidad, capacidad para centrar y un movimiento en diagonal hacia el área muy potente, características muy importantes en el fútbol actual.
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