La victoria del Real Madrid en el Clásico cierra una ‘semana mágica' para la entidad merengue. La eliminación del Manchester City en los penaltis, a manos de la disciplina blanca, se ha complementado con la victoria in extremis de los pupilos de Carlo Ancelotti en el Santiago Bernabéu.
El choque ha estado mucho más competido de lo que parecía, pero finalmente el equipo capitalino ha impuesto su ley en su propio estadio.
Más allá de la importante ventaja de 11 puntos que el Real Madrid saca respecto del FC Barcelona en la pelea por la Liga, las sensaciones en ambos vestuarios son ahora lo más llamativo.
Los jugadores del FC Barcelona han vuelto a comprobar en primera persona la mística y el ADN Real Madrid, algo que todavía sigue siendo un misterio incluso para ciertos futbolistas merengues. Especialmente quienes no llevan tanto tiempo en el club, como Antonio Rüdiger. El ‘22’ alemán está cuajando una temporada imperial, empapándose de todo lo que significa defender el escudo de la entidad blanca.
Ha vuelto a suceder
Pero, a pesar de su magnífico rendimiento, aún se maravilla por lo que es capaz de hacer el equipo si sus jugadores creen en ello. La remontada, confirmada con el gol de Jude Bellingham en el primer minuto del descuento, sorprende a un Antonio Rüdiger que no encuentra palabras para explicárselo a Robert Lewandowski en el túnel de vestuarios del Santiago Bernabéu.
“Nadie lo comprende, hermano, esto es el Madrid”. Con esas palabras, Rüdiger expresa la incredulidad y el orgullo que siente de pertenecer al Real Madrid. El equipo blanco ha llegado tan lejos en casi todas las competiciones esta temporada gracias, entre otras cosas, a su excelente rendimiento. Por eso esta victoria, al igual que el resto cosechadas este curso, se debe a él.
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