El Real Madrid tendrá que sacar la billetera y aportar más dinero a uno de los fichajes que realizó el verano anterior.
Florentino Pérez llegó a un acuerdo con el Borussia Dortmund por la incorporación de Jude Bellingham al club blanco en una operación que se cerró en torno a los 100 millones, pero ambos clubes establecieron unas cláusulas por diferentes variables. Y la temporada del inglés está siendo tan espectacular que el Madrid está obligado a cumplir con sus obligaciones pecuniarias para con el Dortmund.
Entre los objetivos que se marcaron en el contrato que ata al centrocampista con el Real Madrid durante seis campañas, está el de que el equipo sea ganador del título de Liga. Algo que, casualmente, acercó Bellingham este fin de semana en la victoria del Madrid sobre el Barcelona en el Clásico del Santiago Bernabéu (3-2).
Con un gol sobre la bocina, el británico sentenciaba casi el campeonato doméstico, ampliándose la distancia entre merengues y culés, que ya es de 11 puntos.
Otra variable estipulada en el documento firmado por Real Madrid y Dortmund responde al hecho de que los blancos se clasifiquen para la Champions League, algo que ya está materializado y que el conjunto de Carlo Ancelotti ha logrado durante los últimos 27 años anteriores. También se incluyen varios logros personales de Bellingham.
Todas estas circunstancias provocan que el Madrid tenga que desembolsar un 30% más de lo que el club pagó ya al Dortmund el pasado verano. Y en las oficinas del Bernabéu no tienen ningún problema en acudir a la tesorería para cumplir con lo acordado. Consideran que es un “chollo” haber fichado al inglés y en el Dortmund incluso se arrepienten por haber vendido al futbolista a un precio “barato”.
Las buenas relaciones del Real Madrid con el Borussia hacen el resto, por eso no habrá problema en que el Madrid pueda pagar unos 30 millones más por un futbolista que, desde el primer día que llegó, ha asumido un liderazgo atípico en un chaval de apenas 20 años. La campaña de Jude está siendo de escándalo: acumula 36 partidos, con un balance de 21 goles y 10 asistencias. Números de auténtico delantero para alguien que no se desempeña en esa función.
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