El Real Madrid ganó por la mínima ante la Real Sociedad. El equipo local estuvo muy atento a casi todas las acciones del partido, porque tenían mucho que perder: se juegan los puestos europeos.
Uno de los futbolistas que se marchó visiblemente molesto de Anoeta entró en la segunda mitad, para intentar asegurar la victoria. El cambio a punto de estar de cambiar los planes de Carlo Ancelotti para el partido del próximo martes.
Para la Real Sociedad parecía como una final, y por eso tuvieron una intensidad altísima, e incluso superior a la que ponen con el resto de equipos. Es algo a lo que el Real Madrid suele estar acostumbrado, pero no deja de ser sorprendente.
En el partido de ayer, Mikel Merino hizo una entrada durísima al tobillo de Fede Valverde, que se revolvió por el suelo con gestos de dolor. En un primer momento, al ver repetidas las imágenes se veía bien cómo el uruguayo podía haberse lesionado.
“Un poco más y no juego contra el Bayern porque me destroza el tobillo…", se quejaba el jugador del Madrid sobre una jugada tan clara y evidente como peligrosa. Finalmente, todo se quedó en un susto porque Valverde continuó jugando con total normalidad.
Es clave
Fede Valverde se ha convertido en uno de los hombres clave de Carlo Ancelotti. El mediocentro ha jugado en todos los partidos que se han disputado en lo que va de temporada, y en todos ellos ha rendido a un nivel muy alto.
Ha cambiado su rol en el equipo en comparación a la anterior temporada. Ahora juega más por la medular, y realizó un trabajo más defensivo, a la hora de ejercer la presión y recuperar balones. Ya no llega tanto a posiciones de disparo como en el curso anterior. Por eso algunos piensan que ha bajado el nivel, pero ha ocurrido todo lo contrario.
DEJA TU COMENTARIO