El Real Madrid ya es campeón de Liga en un fin de semana glorioso para los blancos en todos los sentidos. Tras algunas horas de festejos, tanto Carlo Ancelotti como Davide vieron la nueva derrota del Bayern Múnich en la Bundesliga. Avisan al vestuario de una clave para llegar a la final que volvió a confirmarse en el equipo de Thomas Tuchel.
La derrota por 3-1 ante Stuttgart en la Bundesliga dejó tocado a unos bávaros donde tampoco hubo grandes rotaciones. Hablamos de un Bayern obligado a sumar unidades en este final de campaña para no perder la segunda plaza de la Bundesliga. Tuchel no quitó de la contienda a los Neuer, Kane, Kim Min-Jae, Joshua Kimmich y Eric Dier.
Dura derrota para los de Thomas Tuchel. Un equipo capaz de lo mejor y peor para el vestuario blanco. Por el cuerpo técnico por supuesto respetan la grandeza de los alemanes y su historial en este tipo de fases de la Copa de Europa como la que se abrirá el miércoles, pero tienen en claro que bloquear a un nombre concreto del Bayern servirá para que todo siga su curso rumbo al 1 de julio por la ciudad de Londres.
Parar a Kane, la clave
Es la gran conclusiones que tanto Carletto como Davide sacan de la derrota de los bávaros ante Stuttgart de este fin de semana. El inglés sigue siendo la única pieza realmente confiable de un proyecto que por momentos toca el suelo y que llegará al Santiago Bernabéu con varias hojas de vida tocadas en lo anímico como físico.
Por Valdebebas creen que frenar a Kane tanto dentro como fuera del área será la verdadera clave de un choque donde sin dudas los blancos se juegan mucho y donde más allá de la rivalidad que existen se ven un poco por encima del equipo de Tuchel. Se viene una final donde el Real Madrid se encomienda al Bernabéu y donde sin dudas existe una hoja de ruta clara pensando en Wembley. Harry es la clave de todo.
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