En la temporada 1997-98 el Madrid fichó en el mercado de invierno a Cristian Karembeu, un mediocentro francés que podía actuar en la banda derecha y que fue clave en la consecución de la Séptima Copa de Europa a pesar de las muchas críticas que recibió por su falta de calidad para jugar en el Real Madrid. El de Nueva Caledonia marcó en los cuartos y en la semifinales de la Champions de dicha temporada goles claves para llegar a la gran final. Después, aunque en esta ocasión con menos peso en el equipo, también ganó la Octava.
Dos años después, en la temporada 1999-00, el Madrid fichó a Nicolas Anelka. El delantero galó vino del Arsenal previo pago de 5.000 millones de las antiguas pesetas y sólo estuvo un año en el club blanco, ya que nunca cuajó como el gran jugador que se esperaba, además de estar media temporada lesionado y ser un futbolista conflictivo. Pero su papel en la Champions League fue fundamental, sobre todo en las semifinales contra el Bayern de Münich, donde marcó un tanto en la ida en el Bernabéu y un golazo de cabeza en la vuelta en el Olímpico que metió al Madrid en la final.
Y, en la temporada 2001-02, el año de la Novena, fue Zidane el francés que llegó al Real Madrid. A pesar de su inmensa calidad, durante su primera temporada en el club blanco el galo sufrió muchas críticas por su incapacidad de adaptarse al equipo y pese a todo, el gran Zizou dejó a todos con la boca abierta con muchas de susjugadas y sus goles, como el que marcó al Barcelona en las semifinales de la Champions en el Camp Nou o el maravilloso golazo de la final ante el Leverkusen que le dio la Copa de Europa al Madrid en Glasgow.
Evidentemente, hay que salvar las distancias entre Lass y Faubert con jugadores como Zidane, o incluso, hasta Anelka, pero la coincidencia de la nacionalidad y las críticas por su fichaje, podría tener el mismo final que en los anteriores casos. Con el Madrid ganando la Copa de Europa, en esta ocasión, el próximo 27 de mayo en el Olímpico de Roma.
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