Sin embargo, la última data de hace bastante tiempo. Corría el mes de abril de 2002 cuando el Real Madrid fue capaz de vencer en el Santiago Bernabéu por 2-0 al Bayern de Munich tras de derrota en la ida por 2-1. En aquella ocasión los tantos de Helguera y Guti en el segundo período hicieron válido el logrado por Geremi en la ida, de manera que el conjunto teutón acabó por morder el polvo mientras que el Madrid avanzaba en su camino para lograr la Novena Copa de Europa.
Pero como decimos, ahí no se acaban las hazañas merengues en Europa. La primera ocurrió en octubre de 1975, cuando los blancos tuvieron que darle la vuelta en casa a un 4-1 que les había infligido el Derby Country inglés en la ida de los octavos de final de la Copa de Europa. Y como no podía ser de otra manera, los Amancio, Pirri y compañía lo lograron, aunque pasando antes por la prórroga para acabar ganando por 5-1.
Después llegarían otras, como las del Borussia Monchengladbach, el Estrella Roja o el Anderlecht. Por ejemplo contra los alemanes el Madrid debía remontar un 5-1 obtenido en la ida de los octavos de final de la UEFA. En una fría noche invernal, Valdano y Santillana, ambos por partida doble, cerraron un 4-0 histórico que clasificaba al equipo y le permitía acabar logrando la Copa. Por no acordarse de la remontada ante el Anderlecht de la campaña anterior, pues el 3-0 en Bélgica fue insuficiente ante la apisonadora blanca que pasó por el Bernabéu: 6-1 y otra noche más para la historia.
En el lado más negativo, señalar que de las once ocasiones en que el Real Madrid se encontró en la misma situación de 1-0 adverso, en cinco fracasó en el intento. Datos que obligan a una lectura positiva, pues los antecedentes dejan claro que las opciones de éxito son superiores al 50%, a lo que hay que añadir que la motivación de esta ocasión es superior a la de las otras veces. El premio de ganar la Décima en casa ha de ser un acicate que marque diferencias, por lo que los cuartos de final deben estar más cerca que nunca.
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