En este sentido, los blancos quieren poner punto y final al gafe de los octavos. El primer paso para ello se consiguió en Gerland, logrando un buen resultado (1-1) que hace pensar que el Bernabéu puede dictar sentencia para beneficio del Real Madrid. Sin embargo, ni Mourinho ni los jugadores quieren confianzas en ese aspecto, ya que el golpe de la temporada pasada todavía está muy fresco.
La sombra que persigue al Madrid en octavos de Champions comenzó en 2005, cuando la Juventus echó al Madrid en el minuto 118 de partido con un tanto de Zalayeta. Posteriormente, y de forma consecutiva, Bayern, Arsenal, Roma, Liverpool y Lyon obligaron al Madrid a realizar el camino de vuelta antes de tiempo. De Mourinho y los suyos depende que el 2011 no se convierta en una nueva procesión europea ¿Lo conseguirán?
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