El 'crack' de Madeira tenía ante sí la oportunidad de igualar frente al Espanyol sus mejores registros de la temporada en lo que respecta a las estadísticas anotadoras: cuatro partidos consecutivos de Liga marcando gol. Antes ya lo había conseguido entre las jornadas 12 y 15 del presente campeonato, cuando logró hacer diana en los encuentros ante el Osasuna, Valencia, Atlético y Sporting de Gijón. Solo el Barcelona logró frenar entonces esta racha, por lo que Cristiano Ronaldo tenía pendiente entre sus debes volver a intentar mejorar esta marca.
Para ello debía marcar el domingo ante el Espanyol. Tras hacer lo propio ante el Levante, Racing de Santander y Rayo Vallecano, el luso se presentaba ante los catalanes con mucho hambre de gol. Además, Messi no había podido jugar este sábado ante el Sporting de Gijón por su sanción, de manera que tenía la opción de seguir abriendo hueco en la lucha por el 'Pichichi'. Una oportunidad única. Así que Cristiano se calzó las botas y cumplió la tradición: perforó la portería de Casilla y levantó los brazos hacia el Bernabéu. Cuatro partidos consecutivos marcando, así que se prepare el Betis...
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