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Bjorn Kuipers sólo había dirigido al Madrid una vez, el año pasado en la ida de cuartos de final. El resultado fue 1-1 con polémica porque el empate del CSKA llegó precedido de una falta no pitada al Madrid. El partido de Dortmund tampoco estuvo exento de polémica, ya que el colegiado holandés erró en varias jugadas perjudicando claramente al Real Madrid.
Si bien el equipo blanco perdió justamente en Dortmund, el castigo fue aún mayor gracias al árbitro holandés. El colegiado permitió a los alemanes jugar al límite del reglamento, obviando faltas y dejando sin mostrar amarillas claras. Así, el Dortmund se creció y acogotó al Madrid. Finalmente, Kuipers completó su obra indicando un penalti de Xabi Alonso por una carga legal.
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