Inversiones millonarias en fichajes que acabaron decepcionando

No todos los fichajes que se realizan terminan triunfando a pesar de costar mucho dinero a sus clubes.


Fred

Fred




Uno de los fichajes que no han rendido tanto como se esperaba es Fred, en el Manchester United. El equipo británico pagó 52 millones de libras por el centrocampista brasileño, pero la joven promesa de 26 años ha jugado como titular en la Premier League solo 10 partidos, marcando un único gol.

Por su parte, Thomas Lemar despegó con fuerza en el Atlético de Madrid, pero ha ido perdiendo fuelle a lo largo de la temporada y ahora parece que los 70 millones de euros que pagó el equipo rojiblanco no han tenido grandes resultados. Simeone, no obstante, ha comentado que confía en que la que viene será la temporada del nuevo fichaje francés.

Thibaut Courtois ha sido otra de las decepciones de esta temporada. El Real Madrid pagó 31,5 millones de euros para ver cómo, el que se consideraba el mejor portero del mundo en 2018, recibió 30 goles en La Liga.

Un ejemplo más de brillantes promesas que perdieron su luz a mitad de camino es Radja Nainggolan. El Inter de Milán pagó 38 millones de euros en el fichaje del «Ninja». Había demostrado sus cualidades en la Roma durante cinco temporadas, pero parece que no ha tenido todas con él en la pasada. Solo marcó tres veces de las 14 que jugó en Serie A y metió una sola diana en los cuatro partidos que jugó en la Champions.


Los 80 millones que el Chelsea invirtió en Arrizabalaga también podrían considerarse un despilfarro después del rendimiento que mostró en la Carabao Cup: un total de 38 goles que Kepa no pudo frenar en los 34 partidos que jugó. Eso, sumado al incidente en el que Arrizabalaga se opuso a que Sarri lo sustituyera por Caballero antes de la tanda de penaltis en la final con el Tottenham, podrían dar algún que otro dolor de cabeza al equipo londinense.

Con la temporada aún sin tocar a su fin, los jugadores todavía tienen la oportunidad de enmendar sus errores. Algunos con más dificultad que otros, muchos de ellos se enfrentan a partidos decisivos donde tendrán que poner toda la carne en el asador. De no ser así, las millonarias inversiones de los equipos podrían ser en vano.