El Barça se la pegó frente al Granada y volvió a tropezar, otra vez, en un partido en casa. Salió escaldado y goleado frente al Bayern de Múnich (0-3) y contra el débil Getafe de Míchel tuvo que pedir la hora. Contra los nazarís han perdido (0-1) con un gol de Domingos Duarte, en el minuto 1 y fueron incapaces de darle la vuelta al electrónico. Solo Araujo, de milagro logró empatar la contienda. Ya se alejan de la cabeza de la tabla.
Un partido pasado por lluvia y que podría ser un símil de los lloros que están por venir en can Barça. Los azulgranas no levantan cabeza, son un polvorín, y Koeman está más que discutido.
El problema para Joan Laporta, más allá que por la crisis deportiva, pasa por no poder afrontar el despido de su entrenador. No hay dinero para maniobras en los despachos. La ruina económica no permite ni el propio cese de Koeman.
Mientras, además, ven como el Real Madrid sale disparado en la lucha por LaLiga y se asoma más líder que nunca. Ya están a 5 puntos de los de Ancelotti que ganaron, de forma heroica, al Valencia.
El Barça se asoma al precipio y ni los árbitros pueden terminar de rescatarlos. La situación culé va de mal en peor y ven como en la otra acera van volados en busca de la 35ª Liga.
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