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El Real Madrid ha estimado que cada jugador tendrá en torno a 50 entradas para la final de Lisboa para que cumplan sus respectivos compromisos con los diferentes patrocinadores que tiene cada uno y para que algunos familiares les acompañen de cerca en ese día tan importante para el equipo y para ellos mismos.
Sin embargo, hay algunos jugadores a los que esas 50 entradas se les van a quedar muy cortas, como es el caso de Cristiano Ronaldo. A los compromisos con patrocinadores, se le une que la final se juega en su país, por lo que hay un mayor número de familiares y autoridades lusas que le han pedido una entrada para acudir al estadio Da Luz.
Parece claro que Cristiano Ronaldo va a tener un serio problema porque no va a poder satisfacer todas las peticiones ya que las entradas son limitadas y dependerá de si algún compañero le cede alguna para poder cumplir con todos los compromisos que tiene. Y es que el hecho de que la UEFA se quede con casi la mitad de las localidades acaba perjudicando a los aficionados y a los propios jugadores.
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