La pretemporada continúa en Estados Unidos para el Real Madrid, con sensaciones buenas, malas y regulares. No todo puede ser bueno en esta vida, pero Zidane ya dio oportunidad de jugar a la mayoría de la plantilla. Unos demostraron más y otros menos, pero al fin y al cabo lo importante es que el club se mantenga unido. Para sacar un resultado positivo ante el Arsenal, el técnico francés ha dado poder en el último entrenamiento. Ha exigido ejercicios físicos caracterizados para mejorar la resistencia, y coger algo de forma tras las vacaciones veraniegas.
Como ya os informamos en Defensa Central, Odriozola y Brahim no jugaron frente al Bayern por molestias físicas. Ambos permanecen lesionados realizando ejercicios con un ritmo menor al resto de compañeros. Zidane optó por no darle minutos a ninguno de los dos, con el fin de que su comienzo de temporada sea bueno, y se estrenen totalmente recuperados. Otra aspecto que ha llamado la atención, es que (Gareth Bale se ha entrenado con el equipo con total normalidad), ningún movimiento extraño. El Madrid ha organizado de la siguiente manera esta sesión de entrenamiento:
Los jugadores comenzaron con carrera continua. A continuación, llevaron a cabo diferentes ejercicios de posesión y disputaron partidos en espacios reducidos. Odriozola trabajó en el interior de las instalaciones, mientras que Brahim se ejercitó en solitario sobre el césped. Ambos están recuperándose de sus lesiones, y en breves días estarán completamente en forma para dar el ‘pistoletazo’ de salida a la temporada 2019-20.
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