El entrenador galo deberá decidir, con qué sistema puede salir mejor organizado su equipo al Camp Nou. El 4-3-3 ha sido siempre su sistema talismán, en su primera etapa apostaba por este tipo de juego con Cristiano, Benzema y Bale arriba. Al no tener este año tan claro su tridente de ataque, puesto que los únicos indiscutibles arriba son Karim y Hazard, con Bale y Rodrygo disputándose el hueco de tercer atacante, Zidane podría optar por el 4-4-2. (El Madrid cambia su plan para el clásico)
Este sistema de juego, de un estilo más equilibrado y conservador, no le ha dado tampoco malos resultados a Zidane. En la temporada 17/18, donde el conjunto blanco ganó Liga y Champions, se decantó en la mayoría de encuentros por este sistema, al estar lesionado Bale. El conjunto blanco jugaba con un 4-4-2 en forma de rondo, es decir, Casemiro como pivote defensivo, Kroos y Modric como interiores, e Isco como mediapunta detrás de Cristiano y Benzema.
Esta temporada, Zinedine Zidane lo usó contra el PSG, y el juego del equipo fue muy positivo. Curiosamente, colocó a Isco que no estaba contando con muchos minutos, como mediocentro ofensivo por detrás de Eden Hazard y Karim Benzema. El Real Madrid cuajó uno de sus mejores partidos de la temporada con este sistema, por lo que es muy probable que el técnico francés termine apostando finalmente por este sistema en el Camp Nou, ante lo que será todo un cara a cara por La Liga.
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